Tras varios partidos contra rivales de menor nivel, nos tocaba el primer hueso de la segunda vuelta. Íbamos al estadio de Jujainas, que nos tenían ganas y nos la querían devolver tras el 5-0 de la ida.
Nosotros plantamos la 4-5-1 que tan robustos nos hace, para dominar la bola y estar fuertes atrás y la verdad es que estuvimos bien todo el partido. Todo el partido menos en los dos goles que nos metieron. Además, tuvimos la pólvora muy mojada. Tanto que de 9 ocasiones (la mayoría por las bandas) únicamente pudimos meter 1. Y eso que las bandas son nuestro punto fuerte y teníamos calidad para convertir. Nada, no pudo ser.
Como referencia, y como viene siendo costumbre cuando el partido nos vuelve la cara, estas eran las previsiones de los analistas antes del partido:
Es decir, un 89% de probabilidades de no perder y la cagamos fuerte. Tanto que un empate nos hubiese hecho depender de nosotros para el resto de la liga y asegurar el segundo puesto.
Una auténtica lástima, ya que ahí nos iba el campeonato (que no el ascenso), ya que nos hubiésemos puesto con 30 puntos, a distancia de 3 puntos del segundo y el tercero que irían empatados a 27. Y solo nos quedaría un partido difícil, en casa contra Vallfosca.
Ahora está en esa postura Jujainas, con la diferencia que solo le quedan partidos contra bots y es poco probable que pierda. A nosotros nos queda el partido contra Vallfosca por el segundo puesto y una derrota ahí sí que sería demoledora, ya que tiraríamos al suelo toda la temporada a nivel deportivo.
Sin embargo, ya como reflexión final, nos queda la nota positiva de haber planteado el partido correctamente y haber hecho todo lo posible. El partido se planteó bien pero no llegaron los goles por azar, o por falta de azar. No se puede hacer más.
El próximo partido de liga en casa contra Orgaceño, 4to clasificado con 24 puntos. Una derrota nos empataría con ellos en el tercer puesto. No podemos fallar.
A por todas!
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